Mi vida en la escuela es muy normal, aprecio a los amigos que tengo, me hacen reír todos los días , sin mencionar que me llevo muy bien con ellos y que llevamos mucho tiempo de conocernos, ya casi 3 años. Los maestros me caen muy bien, enseñan bien y no son de esos maestros que nunca te explican las cosas una vez de que ya dieron su clase, las preguntas que digas, te las explican hasta que te queda claro. Pero, aceptemoslo, sin la escuela posiblemente no tendrías amigos y no sabrías hacer muchas cosas, como cambiar el canal de tu televisor, por que no sabrías contar, no podrías comprar algo, por la misma razón. Mi escuela no es de esas enormes con un gran nivel académico, pero soy muy feliz y con mis amigos todos los días, no los cambiaría por nada. Mis últimos 3 años tuvieron muchísimos momentos felices y los volvería a vivir si fuera por mi, en primer grado eramos más alumnos, pero aunque seamos pocos, somos muy unidos y nos defendemos. Estoy muy nerviosa y al mismo tiempo ansiosa por entrar a la preparatoria, ya que es un ambiente diferente al que vivo todos los días, Ademas, dicen que la secundaria es la mejor etapa que vive uno, que nunca se olvida, otros dicen lo mismo de la preparatoria, pero eso hasta que no lo vives, tu podrás decidir cual fue la mejor para ti, y yo estoy a mitad del camino. Podría decir que mis mejores amigos son todo mi salón, todos me han ayudado y por la misma razón por la cual son pocos, nadie te llega a caer mal, por que aprendes a convivir con todos, sin importar nada.